DESDE LA SELVA DE RADIO CARCOMA, INFORMACIÓN Y ENTRETENIMIENTO EN PAQUETES DE UNA HORA

15 abr 2011

Una tarde en Saigón - 07/04/2011



Flotadores económicos para Portugal, dinosaurios de frágiles caderas y niños chinos subastados. Todo esto y más en Una tarde en Saigón.

8 abr 2011

BECARIOS PRECARIOS


Cuando un becario llega a la redacción de un medio lo hace con ilusión, es su primera incursión en el mundo laboral. Ha llegado el momento de que lleve a la práctica toda esa teoría, en muchos casos poco útil, que ha invadido sus carpetas los últimos cinco años.
Con la implantación del Plan Bolonia parecía que la situación de escasa preparación real de los universitarios tras una enseñanza puramente teórica, había acabado. La cuestión está en determinar, si ese nuevo proyecto europeo que quiere programar las carreras orientándolas a la realidad laboral, incidiendo más en la práctica, y no tanto en la teoría, dará sus frutos. A día de hoy, muchos de los becarios que entran en un medio, lo hacen sin una preparación adecuada y, no están ni de lejos preparados para dar el salto al mundo profesional.
La sociedad debería exigir, al menos a la educación pública, un proyecto de formación serio, orientado a formar buenos profesionales que puedan luchar sin problemas en un mercado de trabajo con una competitividad voraz y cada vez más globalizado.
Para que un país salga adelante, sobre todo en estos tiempos de crisis, se debe hacer hincapié en la formación de buenos profesionales, sobre todo cuando un importante porcentaje del dinero público está destinado a la educación.
La situación actual de los becarios es cada vez más precaria. Muchas empresas se aprovechan de esta mano de obra barata e intentan alargar la situación, sugiriendo incluso a los estudiantes que no finalicen sus carreras, ya que si no legalmente no podrán tenerlos contratados como becarios.
Además de trabajar un elevado número de horas a cambio de una retribución tercermundista ( esto en el mejor de los casos), los becarios tienen que aprender cual es el café favorito de su jefe y cuantas cucharadas de azúcar desea. Muchos de sus compañeros de redacción, se aprovechan de su ilusión y sus ganas de aprender para rebajar su tarea diaria, aumentando, claro está, la tarea del pobre estudiante. Quizá todo esto sea algo por lo que, les guste o no, todos los estudiantes tengan que pasar tarde o temprano, se podría decir que es la novatada de final de carrera, pero dejando de lado el humor, algo que debería revisarse lo antes posible es el hecho de que un becario no cotice a la seguridad social.
Ya me imagino a los empresarios frotandose las manos a su llegada, sabiendose superiores y capaces de delegar en ellos los trabajos más engorrosos. ¡Qué gran invento el de los becarios!